Fotografía de Michael Rangel en un partido con Junior.Michael Rangel en un partido con Junior/internet.

En entrevista con As Colombia, el delantero Michael Rangel se sinceró sobre su carrera, dedicando un espacio significativo a su historia con el Junior de Barranquilla, club en el que jugó en cuatro ciclos. El atacante narró un camino de altibajos, marcado por momentos de gloria y por la sensación de no haber sido valorado.

Rangel rememoró su debut en el club en 2010, donde, aunque su participación se limitó a la Copa Colombia, tuvo la oportunidad de ser parte del equipo que se coronó campeón.

“Desde que empecé en Junior en 2010 solo jugaba Copa, ahí tuve la oportunidad de jugar y ahí quedamos campeones a mitad de año contra Equidad”, recordó.

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Sin embargo, su consolidación no llegó en ese momento. Años después, en 2019, regresó al equipo tras ser goleador con el Atlético Bucaramanga. Esta segunda etapa fue mucho más exitosa a nivel deportivo, ya que se le dio más protagonismo.

La consolidación de Michael Rangel en Junior

“Llegué a Junior y me fue súper bien, terminé jugando las finales y cobrando penal decisivo en la final ante Pasto”, afirmó. A pesar de este éxito, Rangel decidió salir del club nuevamente.

El futbolista explicó que una de las razones de su salida se debió a una constante frustración: la falta de continuidad. Rangel reveló que, en su última etapa, tras ser campeón con el América, donde estuvo a préstamo, volvió a Junior y no fue bien recibido.

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“Nunca pude ser titular. Incluso alcancé a escuchar, no sé si sea verdad o mentira, que de la parte de los directivos decían que no me pusieran a jugar, que siempre iba a estar de suplente”, aseguró.

Julio Comesaña y el arrepentimiento de su vuelta a Junior

El delantero relató el duro recibimiento que habría tenido por parte de Julio Comesaña, quien en ese entonces era el técnico. “Llego a Junior y me reciben con un batacazo, que Julio Comesaña dice que no me va a utilizar, que no me pidió, que no me necesita, que soy el quinto delantero”, dijo.

Esta situación lo relegó, y en sus propias palabras, lo obligó a entrenar aparte. “Me relegó, no me dejaba entrenar con el equipo al principio, entrenaba aparte en el hotel, salía al parque a entrenar solo”.

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Por esta razón, Rangel expresó: “lo único que cambiaría de mi carrera sería no haber vuelto en ese momento a Junior, sino haberme quedado en América”.

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