La trayectoria de Cristiano Ronaldo se extiende mucho más allá de su leyenda como futbolista. A sus 40 años, el astro portugués ha grabado su nombre en la historia financiera: se ha convertido en el primer futbolista en alcanzar el estatus de billonario, amasando una fortuna que, según la valoración de Bloomberg, supera los 1.400 millones de dólares.
Lee también: El balance de la fase de grupos del Mundial Sub-20 Chile 2025
Tabla del contenido
Cristiano Ronaldo y el contrato que impulsó su riqueza
Este monumental logro económico se dio tras la extensión de su acuerdo con el Al-Nassr de Arabia Saudita. Su remuneración anual asciende a unos impresionantes 208 millones de euros, lo que, sumado a bonos y participaciones, lo corona como el deportista con el salario más alto del mundo.
La proyección de Bloomberg indica que, al término de su contrato en 2027, Ronaldo podría añadir ”medio billón más“ a su capital. Un aspecto clave es la obtención de un 15 % de participación en el club, un pacto que, si bien recuerda al de Lionel Messi con el Inter Miami, resulta mucho más lucrativo en su caso.
La estrategia comercial impecable de la marca CR7
El patrimonio de Ronaldo es un testimonio de su visión empresarial, no solo de su talento deportivo. La marca CR7 es un fenómeno global respaldado por un contrato vitalicio con Nike, complementado con acuerdos estratégicos con marcas de lujo y consumo como Armani, Herbalife, Tag Heuer y Louis Vuitton.
A través de sus sociedades, CR7 SA y CR7 Lifestyle, el portugués ha incursionado exitosamente en diversos sectores: moda, hotelería, salud y fitness.
Puede interesarte: ¡Únete a la novena más ganadora! Caimanes de Barranquilla lanza convocatoria de voluntariado
Su portafolio inmobiliario incluye propiedades millonarias en Lisboa y Madeira, y un ambicioso proyecto de 20 millones de euros en Quinta da Marinha.
El análisis de Bloomberg subraya que la base de su fortuna ”radica principalmente en salarios y premios deportivos“. Esto lo distingue de figuras como Michael Jordan o Roger Federer, cuya riqueza se deriva mayormente de participaciones accionariales en empresas.
El impacto económico de su llegada a Arabia Saudita
Su arribo a la Saudi Pro League fue un movimiento decisivo tanto para su cuenta bancaria como para la popularidad del fútbol en la región. Su fichaje por el Al-Nassr desencadenó un fenómeno económico inédito, atrayendo a miles de nuevos aficionados.
El contrato incluyó una bonificación inicial de 30 millones de dólares por la firma y la ventaja de exenciones fiscales, dado que los ingresos deportivos en Arabia Saudita no están sujetos a impuestos.
Bloomberg concluye que Ronaldo ha sabido negociar ”uno de los contratos más cuantiosos de la historia del fútbol y el salario anual promedio más alto para un deportista a nivel mundial“.